lunes, 30 de septiembre de 2024

estrellas de flores al viento

 



estrellas astadas
prestas al vuelo y a la fuga sin guía 
por el libre azul de etéreo vuelo
las semillas viajeras de la peluza 
saetas al cristaldel cielo 
con esplendor de nieve
escribian trazos de azar
en el diario del infinito
en que festejan las flores de diente de león

luz y paz cuajaban en mediodía  
festejaban sobre dispuestas praderas
como siempre al doblar el atardecer
dioniso y todas  sus bacantes
flotando en música del éter
que templaba fina porcelana
en las süaves metacorrientes
de la música de las esferas

osar




atreverse a dar el siguiente paso

entre el vacío y la oscura hermandad

la selva hambrienta y sitibunda

la calle-noche en desierto abrazo

el rio el mar la piratería

en arenoso escenario de ser-pasar

siempre se caerá en algún peldaño

de la musical infinita escala jacobina


o se estará en algún nodo

de la multitudinaria red universal

que progresa en platós horizontales

de independientes vidas y autónomos cultivos

con fuentes propias de oxígenos particulares

    y acuíferos de bosques escondidos

 inventadas en las mismas telas de cuerpos 

    que armaban el ambulante mapa

destiladas en cada plató

en elixires de simples flores 

de místicas especies solitarias

diseñadas con ecuaciones recién convenidas

en las páginas edicto del gran casino


por eso todo paso era un reto

un tiro de dados en lo incierto

no tanto a nacer o morir o parir

cuanto a enfrentar los cambios de naturaleza

que gestaban en secretas metabolias

sus geologías entre días y noches

entre conciertos y numéricas explosiones

ya llegaran diosas, dioses o demonios

inspirando las letras número

del mágico poema de inocencia

guardián en sí del agua viva

que pinta de verdes esmeralda al gran desierto


lunes, 2 de septiembre de 2024

pradera blanca novia solar




nuevas vírgenes y blancas praderas 

para los dedos suaves de matinales musas:

debían componer poemas y conciertos

para cantar las odas vespertinas 

que inaugurarían la noche de gamuzas

con serenatas de sueños y laberintos

encendidos de oníricas floridas caras

celebrando sus paganos carnavales

en siderales constelaciones diamantinas 


bajo imperio de gran silencio en pasta,

de secreto en secreto cundía muda

por la entera pradera la risa llama

    pequeña chispa regando diáspora

    estallando en grito de meridiana fiesta 

bajo rayos flechas del nuevo astro

bohemio grito que crispaba de letras espada

al mar en ásperas olas de poema


olas escritoras de fiero pulso,

   capaces de escribir su saga abstracta

   con caracteres de ciclón bravío

   en todo el manto de alabastro

   que se extendía en pradera blanca,

   o en playa de níveas arenas

imprimían sin cesar su aliento impío

con nuevo verbo de signo convulso


llanura de visiones en perla bruma

sembrada en tutela de rocas enigmas

en que grabaran soplos los estros milenarios

bajo el montañero azul de holística suma,

pues todo era texto y música y palabra

que se esculpía en roca con viva letra 

a golpes del viento rápsoda en grises campanarios

y hondas caídas en geográficos cañones estigmas:


verbo hecho carne y mundo y atómo en polvareda

al ritmo del corazón que ondas cabalga fuera de ruta

y a la galaxia inyecta dulce asueto de su leda

en limpios cielos de lapislázuli 

donde salía a flote la felicidad absoluta

de existencia en sí del ser completo

a lomo de la más sutil burbuja en aleli

volando a sueño suelto de viento de vereda


sobre el campo perfumado

de la llanura somnolienta

blanca novia del sol en crema

que disuelto en grata luz etérea

presidía la actual jornada en fiesta

ponía a danzar a las pequeñas flores

nacidas hoy al calor de su bohemio fado

en helix amarilla roja rosa y magenta

y ordenaba alada procesión

ofreciendo al cielo la bella novia


en esa luz levitan las frescas floraciones

azotadas por vientos en fiera danza

bañadas en la silente leche de astral gracia

    que era el pozo de la infinita luz en eones 

    inundando el entorno en cristalina radianza; 

lucían sus mejores trajes de matinal audacia

y encendían sus vivos pétalos de alabanza

entonando en coros los susurros de ciclones

consagraban al aire de alegres rosas

los pétales de sangre en que reía la ragaza


era el dictado del tumultuoso océano

cuando producía versos de líquidas estrellas

en efervescencias de ariscas cantatas

y deliraba en su lengua de aguas y perlas

invocando con frenesí cielo de verano

encarnado de ternura como sus mejillas

jugando al arrebol bajo sus nocturnos ojos

para comprar constelaciones baratas

y jugarlas contra algún vacío de ébano

en playas ebrias de furiosas fogatas


se invocaba la luz milagro del verano

que llegaba con ubicuos fuegos de san alejo

bajo el peinado sombrero del huracán;

en ella se fraguaban las nuevas figuras

de transfigurados aires rasgos de azar

y nacían mundos de fiesta en el brillo ciego

pullando loas en vivas y felices bocas

como hongos de bosques y espesuras

bajo las calladas durmientes hojarascas

pullaban los himnos en que variaba el arcano 



jose del viento
septiembre 2-14 2024
octubre 20 de 2024