declarada visita al abismo
salida de campo hacia el vacío
sin retorno ni posible recompensa
pues de singular señor en sismo
arriesgaba en sus recetas lo anodino
que en ningún ángulo de total confío
ofrecía un beso en puro ambrosío
picnic viola en la noche de vino
con quesos de la añeja y siempre fresca Francia
a la espera del alba en rosa mansa
que encendería en vivos circuitos
con leche prepotente de amante diosa
las máquinas del capital-mundo-vocerío
era el tufo del mismo demonio
que preñaba la tierra en visceras negras
o a los desiertos de ángeles rubios
poblaba de luces y astrales brillos
y en los mares de tifones tumutuosos
dibujaba olas de delicias y torturas
de caricias y maquínicos tiburones
o multitudes de moleculares pirañas
llegando abandonando en vaivén de fieras
islas de virginal arena blanca
en senos, caricias, puñales y paraísos
en crespos de iras, gracias y tormentas,
siempre entre las pieles de rosas y ninfas
o pavorosos faunos
las dulces voces del armonio
llevando ubérrima y arbitraria nave
a la conquista de novedosas aventuras
el cielo se encrespaba gris y fosco
en airadas facciones de anciano,
se arrugaba en gruesasn pieles de hipopótamo
en adusta escritura de rostro agrio
que era borrada en pleno
por la pluma juvenil
de florida risa y ágil danza
que pugnaba por reinar
entre los códigos del día,
las barbas del pádre celestial
y la arena de pasiones de la medianoche
la creciente del alba en sacro azul
y la resaca matinal de juguetonas ondas
que azotaba las playas del Vacío
y preparaba todo para la llegada del nuevo sol
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