domingo, 20 de septiembre de 2020

Jardín rosado



De pronto estaba en la gentil puerta

de oasis en rosa de la dicha

donde habita la gran felicidad

del instante sin duración precisa

que cuida rosas y margaritas

burlando los celos de la noche

y cifrando las claves del sueño


Pero solo escuché ecos sordos,

cerca o lejos del duro corazón,

atlético músculo y gran portal 

del éxtasis do mora la emoción

en medio de armónico silencio

y selváticos tambores.

Bañado en el perfume del rosal


mutaba presto a alegrías y temores.

Asustadizo e inestable,

sufría ligeros cambios de ritmo

con abrazos y traiciones.

Variaba a la velocidad de la luz

como sombras y brillos 

en día de sol y fugaces nieblas 


No sabía cuánto más con su cruz

cuándo cesarían sus latidos

y sólo viviría el silencio "in nihilo"

con el viejo sabor de su jardín

cuando lo tuvo cerca y estuvo "ad portas":

con un instante ya había infinitos, 

un beso suyo para ser su comodín.


Mundo loco, qué será?

será la esfera? el huevo? el cardio?

Ante el cielo en absoluto viento  

de ajenos astros y meteoros?

O será nuestro abstruso caosmos,

esa niebla en mente laberinto,

capaz de ecuaciones, inversiones y convulsiones?


Entre fresa y rosa de osada sangre

Entraba y salía de jardín de diosa

Reía y lloraba, cantaba y gritaba 

contra fondo de grillos en bajo continuo

cuyo monoritmo dirigía ingenuo:

solo había un cadáver al fondo del alma

el cadáver del amor para siempre perdido.


José Guillermo Molina Vélez

Medellín , El corazón, Finca Villa Mercedes 

Septiembre 14-21 de 2020

No hay comentarios:

Publicar un comentario